Cuando el pasado mes de septiembre un gran grupo de velezanos conocieron la propuesta de solicitar al Obispo diocesano la autorización pertinente para que la venerada imagen de la Virgen del Saliente pudiese visitar el pueblo de Vélez Rubio parecía casi una utopía. Todos coincidíamos en que poder recibir la sagrada imagen de la Pequeñica sería todo un privilegio y lo veíamos como algo casi inalcanzable.
El amor y la devoción a la Virgen del Saliente en estas tierras es una realidad palpable en su vida de fe, constante durante generaciones. El Santuario del Saliente ha sido para los velezanos un lugar de visita, de ruegos, plegarias y, sobre todo, de acción de gracias a la Virgen por tantos favores concedidos.
Las ramblas y caminos de nuestro entorno son testigos del ir y venir a pie de peregrinos que no sólo durante el mes de septiembre, sino en otros momentos del año, se encaminan al Saliente al encuentro con la Virgen.
La noticia de que la visita es posible y está cerca nos hace soñar ya con esos momentos. Un sueño hecho realidad. Una visita que llena de profundo regocijo al pueblo de Vélez Rubio. La Virgen del Saliente va a devolver a los velezanos la visita que durante tantas generaciones tantos lugareños le hicieron a ella.
Será para este pueblo un gran acontecimiento que se preparará con todo el cariño y esfuerzo para que sea una visita inolvidable. Una comisión de lugareños será la encargada de organizar todos los actos en torno a esta visita, en trabajo conjunto con la comisión del Santuario del Saliente y del vecino pueblo de Chirivel, creadas para la organización de este magno evento y con la ayuda de las autoridades locales, que ya han mostrado su disponibilidad para la preparación de esta histórica visita
Javier Ruiz Pérez
Párroco de Vélez – Rubio y Chirivel
